

En los oceanos insondables y desconocidos de mi eterna soledad las ruinas de la antigua ciudad caen a los abismos fríos de mi mente marchita ... transformandolo todo,mientras los desteñidos libros se van quedando en blanco ;y yo en mi desesperada lucha siento que su angelical y frágil silueta se pierde mas allá de los oceanos lejanos y profundos. Solo me queda su voz pero hasta ella se perderá en los confines de mi agonia...
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